jueves, 27 de enero de 2022

Mariquitas

 

Ella estaba en la puerta de la calle muerta de frío. La puse entre mis manos y cerre para darla más calor. Enseguida entró en calor y comenzó a caminar por la palma de mi mano. Sentía sus patitas y me hacían cosquillas. Me gustaba. Cuando llegamos al sol, abrí la mano y salió volando. Ohhhh, me hubiera gustado que se quedara conmigo.


Al rato me encontré con otra y la recogi, más de lo mismo, en cuanto entró en calor y abrí la mano salieron sus alas amarillistas muy suaves y se alejó. Me sentí su salvadora porque el frío las paraliza lo mismo que  a mí.
Hoy hizo un día buenísimo, al sol casi calor.
Sé que tiene que llover, pero ahora es mejor que no, que haga sol para que mi padre coja fuerzas en los paseo, que ahora son cortos, pues anteayer le temblaban las piernas y hoy ya puede caminar .
Llegando a casa mi padre llevaba una mariquita en la gorra.
Que suerte, sentía que querían hacerme feliz 
Mariquita lectora. Leía tan deprisa que no me daba tiempo de hacer la foto

Mariquitas malabaristas


Mariquitas trepadora

Aquí me estaba despidiendo de ella y abrí la ventana, movi la mano y salió volando. El calor de la tarde le dará tiempo para cobijarse en un lugar a salvo.
Me ha encantado encontrar estas lindas mariquitas, me han alegrado el día.

7 comentarios:

  1. Ni se imagina que se ha hecho famosa!!!

    :)

    Besos.

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  2. ¡Qué cosa tan deliciosa, Isa! En lo sencillo de la vida se encierra todo su misterio y también su belleza. Solo se necesita saber mirar.
    Un abrazo.

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  3. ¡Qué buenas fotografías¡

    Me alegro que se vaya recuperando tu padre, espero que pronto coja más fuerzas.

    Besos.

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  4. Son preciosas. Uno de los animalitos más simpáticos y que más me gustan.
    A ver si se va ya el frío.
    Que se recupere pronto tu padre.
    Abrazos Isa.

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  5. Que lindas fotografías
    Y seres tan pequeños hacen mucho por nosotros...

    Saludos

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  6. Qué grato leer este post, mientras el día se pone oscuro. UN abrazo. Carlos

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  7. Que preciosa e inspiradora mariquita nos dejas, Isa. Es pequeña y grande a la vez, nos muestra su belleza, su confianza y su sencillez. Gracias por traerla.
    Mi abrazo entrañable y feliz mes de febrero, Isa.

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