Se puso muy contento y disfrutó de unas horas con su prima y uno de los hijo que tiene.
Un abrazo muy sentido, tan sentido que las lágrimas de los dos corrieron por sus mejillas. Es una odisea que mi padre suba al coche. Se ahoga, respira fatal, y se marea, pero pasó un reto en compañía y muy contento. Ver estas fotos alegran y se ve la amistad de tantos años que a pesar del sufrimiento y que les ha cambiado a los dos la vida, aún sienten alegría al volverse a ver.
Querían darse un abrazo y se lo dieron, a la porra el covid. Estamos esclavizados por una mota de polvo muy dañina. Estamos apartando los sentimientos y la relación familiar. Esos besos y abrazos ya no se los quita nadie. Ella es Tina, está casada con Lorenzo, uno de los los siete hijos de los hortelanos, desgraciadamente él ya murió. Él era familia de sangre de mi padre, siempre se llevaban muy bien, pero la vida se va acortando para muchas personas.
:)
ResponderEliminarBien por ese reencuentro y por ese abrazo.
Y sí, ya vale de esta esclavitud.
Los políticos, aprovechándose de la situación, están pisoteando nuestros derechos.
Yo tomo nota.
Y no olvido.
Besos.
¡¡Qué bien que hayan podido verse¡¡¡
ResponderEliminar¡¡Besos¡¡
Lovely post
ResponderEliminarEnternecedoras fotos, Isa. Bello, reencontrase con la familia con la cual poco se frecuente, por distancias u otros impredecibles. Un abrazo. Carlos
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