lunes, 1 de octubre de 2018

¿Que son los abrazos?

En la infancia un abrazo es sentirte arropada por tu madre. Sentir que siempre estará a tu lado en los momentos felices y en la tristeza. Sentir que no estas sola y que tienes en quien confiar.  Un abrazo es sentir la fuerza de un padre y cargarte de energía positiva y de valor para afrontar todo mal que se cruce en nuestro camino. Un abrazo es el regalo más valioso si se da con sinceridad y con aprecio. Yo no soy de abrazar, pero sé que un abrazo es muy beneficioso. En mi vida, he sentido pocos abrazos de estos que yo llamo cargarme de valor y dejarme relajada por sentir que si me quieren y que es un querer sin egoísmos ni mentiras.

Desgraciadamente no recuerdo ningún abrazo de mi madre. Y me encantaría recordarlo porque sé que me quería con locura. Nos quería hasta no poder querernos más porque sabía que se le escapaba la vida.
Mi padre no ha sido, ni es  una persona de expresar sus sentimientos, sus sentimientos los dejó aparcados hace cincuenta y cuatro años  cuando mi madre  se murió. Ahora sí soy yo quien le abraza con fuerzas y él se deja porque ya está muy mayor, se deja querer.

Mi compañero sí me abraza, me gusta, me hace sentir querida y me da fuerza. Yo lo abrazo muy a menudo porque me gusta sentir que su corazón late y me gusta quererlo y que él se sienta querido.

Hay muy pocas personas con las que  me  haya encontrado en mi camino que abracen y sienta su abrazo sincero. Con ello no digo que no abracen de verdad, si no, que yo no soy capaz de apreciar ese abrazo. Tal vez no sea un problema de ell@s, si no mio.
El último abrazo desgarrador que he sentido es el que le di a mi prima en el tanatorio la semana pasada. Me llegó su abrazo y sentí la desesperanza y el sufrimiento cuando estábamos abrazadas. Fue un abrazo duradero de unos cuantos minutos. Un abrazo de abatimiento por la perdida de su marido. Abrazos que duelen a pesar de que los das para dar fuerza y hacer sentir a la otra persona que estas con ella y a su disposición. Me llegó muy hondo su dolor y me metí en su piel y vi y sentí su sufrimiento. Es como si una nube negra te hubiera tragado y solo ves negrura y dolor.
Hay abrazos que rompen el corazón y que no más puedes aguantar el abrazo para soportar el dolor de la persona a quien abrazas.
Cuando una persona pierde a un ser querido en minutos, es más doloroso que cuando a fuerza de sufrimiento por enfermedad la pierdes. A lo largo de ese tiempo de la enfermedad, vas asimilando la pérdida y el sufrimiento te va endureciendo. Pero de la noche a la mañana perder a alguien querido, es como si el mundo se hubiera terminado. Como si se hubieran fundido todas las luces del mundo, y las estrellas dejaran de iluminar. Se cierran las cortina de los ojos y aunque estén abiertos solo ven negrura y desolación y mucho dolor.

Hay que volver a retomar los abrazos. Los abrazos son el  medicamento que  curan el alma.
Los abrazos son el alimento que nos harán más fuertes y nos cargaran de positividad para caminar entre la tristeza. Dame un abrazo y recibe el mío sincero. Abrazossssssssssssssssssssss para quien los quiera y para quien los necesite.





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