Cuenta una leyenda que varios pajarillos se criaron en una jaula muy pequeña. Cuando sus plumas fueron creciendo intentaron volar. Nunca lo lograron porque sus alas se chocaban con los barrotes de hierro e incluso se hacían pequeñas heridas que sangraban.
Fueron creciendo y nadie les dijo que eran pajarillos y que tenían el privilegio de tener alas, nunca más intentaron volar y conocer otros mundos.
Pero un día un niño se acercó a la jaula en donde tomaban el sol los pajarillos y les dijo que por qué eran tan tontos de seguir ahí encerrados. Que ellos podían volar y dejar esa jaula que los aprisionaba, y que no dejaba extender sus alas, ni salir al encuentro de otros pajarillos, o de conquistar la felicidad.
Se criaron encerrados y sin estímulos, sin caricias ni abrazos.
Sus miradas eran tristes y opacas. El brillo era toda una ausencia en esos ojillos negros. El niño abrió la jaula pero ellos no se inmutaron.
Tenían metido en la cabeza que no podían volar, por ello, no hicieron intento de salir volando para conocer otros lugares.
Durante un largo tiempo el niño iba y corría, movía sus bracitos como si fueran alas.
Uno de los pajaros intentó hacer lo mismo y se mantuvo un rato en vuelo dentro de la jaula.
Sus hermanos se quedaron asombrados.
Al día siguiente hicieron lo mismo.
Cuando volvió el niño hizo la misma operación de cada día, abrir la jaula y ponerse a jugar para que lo vieran sus amigos los pajarillos.
De pronto uno salió volando de la jaula. Al rato otro, y al poco tiempo el otro.
Se dieron cuenta de la belleza de saber volar, pero volvían de nuevo a meterse dentro.
El miedo de no saber desenvolverse en la vida les hacía prisioneros de ellos mismos.
El niño volvía un día, otro,... hasta que los pajarillos salieron volando y nunca más regresaron.
Moraleja:
Si la vida no te dio alas para volar
Si la vida te negó inteligencia y astucia
si la vida te privó de lo esencial que es el cariño y el amor.
Que sepas, que tú eres también un hijo de la naturaleza,
por ello tienes los mismos privilegios que los demás.
No dejes que nadie te prive de libertad.
Retira amarras y date una oportunidad.
Todo se aprende,
nadie es más que nadie.
No importa que sea tarde si con ello consigues la libertad de sentirte persona.
Todos nacemos sin saber nada de la vida.
Vuela, tu tienes el control de tu vida,
y si tienes tus alas rotas,
deja que el día a día te las sane para que vueles tan alto como desees.
Oportunidad
La oportunidad ni se compra ni se vende
llega sin más aunque sea esquiva.
La oportunidad que no se aprovecha, se escapa.
Dicen que no hay segundas oportunidades.
Sin embargo cada día tiene nuevas oportunidades.
Cada día es el momento propicio para poder cambiar algo de nuestras vidas,
o para darnos la oportunidad de ser más felices.
De acceder a un trabajo, de conocer gentes distintas.
La oportunidad es de color transparente,
de ahí que sea tan difícil de saber que oportunidad nos conviene.
O si es la adecuada para el momento que estamos viviendo.
Date todas las oportunidades que creas que debes darte en la vida,
para hacer nuevos cambios, o para quedarte con lo que tienes.
Ante todo, date la oportunidad de ser feliz.
Isa, primero de todo, las fotos son preciosas y entrañables...Esos pájaros chiquitos son una preciosidad...Tus letras claras, creativas, profundas, sentidas y realmente bellas, amiga...Mi felicitación por esta "hermosa oportunidad" que tu aprovechas para dejarnos un post generoso, humano y gratificante. Mi abrazo inmenso y mi cariño, Isa.
ResponderEliminarM.Jesús
Isa, aleccionante el texto de los pajarillos. Asumo que la idea relevante, es que llevas a que el lector entienda la necesidad de SER, de hacerse sujeto moral de su propio destino. UN abrazo. Carlos
ResponderEliminarSiempre es un placer leerte.
ResponderEliminarMaravillosa entrada, instrutiva y con una hermosa moraleja.
ResponderEliminarUn abrazo.
Vengo directa del Blog de Tracy y tras leer su apuesta llego aquí y solo deseo darles las gracias por la oportunidad de leerlas.
ResponderEliminarSaludos desde Tenerife y besos de gofio para dar energía.
Isa me encantaron los dos aportes, el primero es una lección de vida. Hermoso relato que nos hace reflexionar y cuyo final me agradó mucho!
ResponderEliminarY sobre la oportunidad es cierto hay que permitirse tomarlas, vivirlas, porque pasan y no vuelven.
Gracias por este doble regalo que me has hecho.
Un beso inmenso!
Hermosas narraciones... tienes un espíritu docente que te adorna siempre y en todo relato, ficticio o verdadero aflora intacto, convincente. Acá en tu nube tenemos la oportunidad de aprender muchas cosas... Gracias Isa.
ResponderEliminarIsa, absolutamente precioso -en cuerpo y alma-.Escribes bien y lo que dicen tus palabras revelan una exquisita sensibilidad . ¡Cuánto talento, cuánto amor, cuánto saber, se pierde por falta de oportunidad!
ResponderEliminarTodos estamos capacitados para volar pero hay millones de personas enjauladas.
Un abrazo.
Feliz fin de semana.
ResponderEliminarUn abrazo.
Preciosas aportaciones Isa. Si nos criamos en esclavitud y sin libertad, sentimos que la asencia de esta es nuestra condicion natural.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Querida Isa es un verdadero placer pasear por tu blog y sentir como tras tus palabras hay ese mensaje que nunca debemos de olvidar, para ser mejores de lo que ahora mismo somos.
ResponderEliminarBesos
¡Qué gran metáfora nos has traído hoy Isa! Yo creo que tenía que estar incorporada en todos los materiales de educación para que en todos los niveles la tuvieran presente. Resume la esencia y desarrollo de todo ser vivo.
ResponderEliminarA cuántos se les han ocultado sus alas.
Besos y feliz fin de semana
La libertà è un diritto di tutti. Buon inizio settimana...ciao.
ResponderEliminarGraciassssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss a todos/as
ResponderEliminarAndo con poco tiempo, siento no poder entrar a visitarlos con la asiduidad que me gustaría. Perdón.
Saludos y abrazos