Un murciélago atemoriza en la oscuridad.
Su presencia hace que el tambor del corazón golpee fuerte pidiendo auxilio.
Algo tan pequeño congela la mente, y un grito suena retumbando en el vacío del ambiente.
Vuela sin control, tal vez, él tiene el mismo miedo que yo.
El miedo al miedo,
a lomos de un caballo
cabalga el miedo.
No dejan volar,
los miedo infantiles
tienen memoria.
El silencio intimida,
La oscuridad da pánico.
La soledad hace palidecer.
El miedo es un cuchillo de doble filo,
corta las alas de raíz y nunca crecen.
Sin miedos uno crece,
vuela, se forja metas,
las cumple, sigue volando.
Infancia reprimida,
golpes, brujas, hombres del saco.
Ninguna caricia.
Miedo a volar por inseguridad.
Isa, nos dejas una bella reflexión sobre el miedo, que muchas veces viene de la infancia, es cierto...Sin embargo, la vida nos da oportunidades para vencerlo siempre y ser libres...El arma más poderosa para vencerlo es el amor...Mi felicitación y mi abrazo grande, amiga.
ResponderEliminarFeliz semana, Isa.
M.Jesús
Hola María Jesús, gracias.
EliminarAfortunadamente la vida nos da oportunidades para vencer los miedos.
Saludos y un abrazo grande
Todo eso es miedo y provoca miedo , excepto el murciélago: a mí me produce asco, un asco tremendo.
ResponderEliminarHola Tracy, gracias.
EliminarA mí el murcielaguina me produce asco y miedo de que se choque contra mí. Aun así le hice la foto.
Saludos
Los valientes luchan con el miedo y lo dominan, pero no viven asustados. El miedo es esa cosa que la imaginación convierte en algo descomunal.
ResponderEliminarMuy buenas tus reflexiones.
Un beso.
Hola Disancor, gracias.
EliminarTú eres un gran valiente y muy luchador.
Saludos y un abrazo fuerteeeeeeeeeeee
Nos viven instalando miedos desde que nacemos, y es tan linda la infancia que los dejamos de lado, pero al crecer se acentúan y se van metiendo en nuestros días. Hay de todas las clases como bien vos lo mostras en este genial aporte.
ResponderEliminarGracias por tu presencia, un beso enorme.
Hola sindel, gracias.
EliminarAsí es, desde que nacemos nos meten miedos y de diferente calibre.
Saludos y un abrazo
Muchas veces los vienen generados por una educación recibida, pero el tiempo nos enseña como lidiar con ellos.
ResponderEliminarBesos
Hola Ilesin, gracias.
EliminarAsí es, el tiempo nos enseña a lidiar con ellos.
Saludos y un abrazo
Se van colando desde siempre los miedos, pero poco a poco los vamos superando
ResponderEliminarAbrazos.
Hola Verónica, gracias.
EliminarSí afortunadamente los vamos superando poco a poco.
Saludos y un abrazo
A todos los miedos haya que aprender a vencer.
ResponderEliminar=)
Hola Neogéminis, gracias.
EliminarSí no nos queda más remedio que aprender a vencer, si no, nos vencen ellos a nosotros y no estamos por la labor.
Saludos
"No dejan volar, los miedos infantiles tienen memoria"
ResponderEliminarMe parece destacable absolutamente....
Me gustó leerte y estar en buena compañía. Ayuda con el miedo.
besos
Hola Casss, gracias.
EliminarMe alegro qeu te haya gustado leerme. Para mí ha sido un placer que me leas.
Saludos y un abrazo
Sin duda hay muchos tipos de miedo, y a veces los miedos nacen de la repugnancia, como con los murciélagos, pero vengan de donde vegan, hay que enfrentarlos y darles un puntapié.
ResponderEliminarSaludos
Hola Narci, gracias.
EliminarAsí es, hay qeu vencerlos y darlos un puntapiés para que se alejen.
Saludos
Muy reflexivas tus palabras sobre los diferentes clases de miedo. La fórmula mágica es: enfrentarse al miedo con valentía y decisión. =)
ResponderEliminarSaludos
Hola Yessy, gracias.
EliminarAsí es lo más importante es enfrentarse a ellos.
Saludos
El miedo es una cárcel que nosotros mismos tejemos con nuestros pensamientos y nos mutilan, nos limitan para siempre. ¡Muy bonito!
ResponderEliminarBesos.
Hola Francisco, gracias.
EliminarTienes razón pero es tan dificil ponerle rejas al miedo.El miedo es libre y se instala allí donde ve que estará cómodo.
SAludos y besos
El miedo no nos deja volar, como dices tú, se necesita crecer y dejar el miedo atrás.
ResponderEliminarUn abrazo
Hemos de dejar los miedos atrás si queremos crecer como personas.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola CArmen, gracias.
EliminarAsí es, hemos de vencer los miedos y así creceremos como personas.
Saludos y un abrazo
Isa, tus entradas me gustan siempre por su originalidad. Esta es preciosa; unas reflexiones muy certeras sobre el miedo, sobre todo los de la infancia, que dejan huella.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Fanny, gracias.
EliminarSí a mí me parece que son los miedos de la infancia los que más cadenas nos ponen para que no podamos ser libres. Pero hay que romper esas cadenas y encadenar a los propios miedos.
Saludos y un abrazo