Me ha picado un bicho, dos, tres, no lo sé

 Hay algún bicho que me ha chupado la sangre. Es que tengo mala suerte con los bichos, se ve que tengo una sangre muy dulcecita y todos me pican a mi.

Ya dormimos con un pijama que se llama piel, y mira tu por donde, los mosquitos, las pulgas que han venido con las verduras del huerto, o quien sabe qué bicho, se ha alimentado de lo lindo con mi sangre.Yo pensaba que mi sangre era mala, pero parece que gusta a todos los bichos.

Menos mal que los mosquitos o el bicho que sea, me ha respetado y sólo me ha picado en las piernas.

Parece que el resto del cuerpo no era de su gusto, afortunadamente para mí.

No se han atrevido a subir más arriba de las rodillas. Han pensado que en cierto terreno tenían que saltar o esquivar el vello ensortijado. O debe de ser que como ciertas partes del cuerpo están más sabrosas, los bichos son más de dulce. Total que por donde se suda no se han metido a navegar.

Hoy se han saltado la barrera y han picado en mi ombligo. Mira que son tontos los bichos, no hay otro lugar más accesible que el ombligo con un botón.

Me he comprado repelente de insectos, veremos a ver si me respetan o por el contrario se piensan que todo el campo es oregano, digo el cuerpo es orégano. Si se apropian de mi cuerpo y me lo picotean todo, no sé que voy hacer.

El sábado si no pasa nada y estoy bien, iremos a concursar a una sala de fiestas. Bailaremos una rueda de salsa cubana. Cuidado con lo de cubana no haya malos entendidos. Bailar una rueda de salsa cubana, no es lo mismo que hacer una cubana.

Seguro las piernas que no las tengo bonitas, con los granos parecen aun más feas. Llevaré medias color carne de rejilla, tal vez los granos se asomen al balcón y me hagan afear mis piernas.

Que hagan lo que quieran los granos, están en su derecho, son libres.

Espero no tener ningún grano más. Por favor ahora que le piquen a mi compañero que se acuesta con otro pijama como el mio, con su propia piel fabricamos su pijama.