Cabritas...

... Hola, aquí un ratito reposando.

Tú no la mires le decía una cabra a la otra.

Si te haces la desentendida, seguro que se cansa y se va.

Hazte la distraida a ver si esta pesada con la cámara se aburre y tira para delante.

... No me hagas una foto, pues no ves que estoy muy fea sin mi lana.

...Ayyyyyyy, que mala es la vida de la cabra.

Caminamos mucho para poder comer.

Mientras tanto las ubres se van llenando de leche.

Pero si tengo sed no puedo mamarmelas.

Y luego viene el pastor que está todo el día debajo de una encina, y me ordeña, se lleva mi leche sin pedirme permiso. ¡¡Qué vida más mala tenemos las cabras!!

Anda bonita, deja ya de molestar con el clic para retratarme y enseñarlo luego en tu blog

Caprichos de la naturaleza.

Qué presiosidad, es como si llevara un gersey negro y unos pantalones blancos.