Cómo van pasando los años

Ayer domingo vino a vernos mi amiga Mari Presen. Ya hacía más de un año que no nos veíamos. Estas fotos de las piedras no son mías, yo aún no he ido a este lugar tan bonito del pueblo, lo tengo de momento presente para ir cuando podamos que seguro no será tarde.

Seguro que por aquí se escribe un bello poema.

Hay muchos lugares aún desconocidos, porque aunque parece un lugar pequeño su extensión es grande.

Mi pueblo está rodeado por muchos cantos, mejor dicho piedras  enormes 

Muchas veces he pensado que como algún día echen a rodar, rompe medio pueblo seguro

Pero esto no va a pasar porque están bien fuertes sujetas al lugar.

Mi amiga y yo ayer.

Los años no pasan en balde 

Que mayores nos hemos hecho, yo  apunto de cumplir los 63 años, en ocho días mi cumple.

Ya si es hora que vuelva a pasar por el quirófano para que retoquen mi corazón. Tengo miedo, pero después de treinta años hay que volver a intervenir. Pero estoy feliz porque mi vida cambió para bien y espero que cuando vuelva a operarme quede un corazón de una joven de veinte🤗😜

Sobre todo que me dé la calidad de vida que he tenido durante estos años

El sábado estuvimos en Hinojosa de San Vicente,  nos invitaron a comer  mis cuñados y estuvimos en  la Asociación de Caballistas

No estuvo muy concurrido porque la gente tenía miedo del agua. Si no recuerdo mal se sirvieron 200 platos de caldereta. El primer año que nos invitó mi cuñado estaba a tope y fue precioso. Montones de caballos y carrozas. El agua asusta y más las tormentas

Por estos lares en una semana han caído más de 160 litros por metro cuadrado. El agua cuando cae con mesura soluciona mucho problemas. Pero cuando llueve cantidades abundantes destroza. 

Lo pasamos bien y seguro el año que viene volvamos a bajar de nuevo.

En este caballo montaron muchas personas grandes y chicas. Yo no me atreví porque ya no estoy tan elástica como me gustaría y tengo que tener cuidado con los golpes.