jueves, 12 de enero de 2017

Micro-cuentos eróticos

...  amanecía sudando. Parecía que había mojado la cama. Sin embargo, él sabía que era sudor.
Su miembro duro como una serpiente arqueada levantaba las sabanas y comenzó a echar una especie de crema lechosa.
Al otro lado de la puerta de la habitación, su madre llamaba con los nudillos de la mano destrozados porque como cada día, él,  llegaría tarde al instituto.

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... sus pezones color cereza se endurecen al roce de su hábito.
Pero ella movía la cabeza para alejar la idea, y, no tentar al demonio. Entró en la capilla a ver si los santos la refrescaban al rezar. Pero su cuerpo, seguía febril, y, no por ninguna enfermedad, sino, porque su sexo clamaba placer. Salió corriendo a su habitación. En el cabecero, junto a la cama,  un cristo en la pared. Le dio la espalda y comenzó a jadear.

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... es muy moreno,  de pelo rizado y cuello grueso. Sus ojos destacan con  su piel porque son del color del mar.
Cuando abre la puerta para que suban al taxi l@s clientes, se quedan embobad@s.
Algunos ojos desde atrás se cruzaron en el espejo retrovisor con los suyos.
Hombres y mujeres se declararon antes de abandonar el taxi. Algunos llegaron a sus  destinos y pagaron otra carrera porque quedaron enganchados de la belleza de su rostro. Él, es como un imán que  atrae a ambos sexos.


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... se equivocó y se metió en la sauna de hombres. Ellos quedaron paralizados, mientras, ella disfrutaba de cada momento. El sudor iba a toda carrera saltando por sus turgentes pechos. Llegaba al ombligo convirtiéndolo en un océano. El sudor seguía bajando y el  océano rebosaba mientras convertía su vulva en un mar embravecido.

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... tenía cita para que el médico la evaluara. Le puso el termómetro, pero no tenía fiebre.
Ella seguía quejándose de que estaba muy caliente. El médico la recomendó baños de agua fría y la dijo que por ese tipo de calentura, no era menester  acudir a la consulta.

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5 comentarios:

  1. Vaya, te has subido a la parra jeje.

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  2. Se te dan muy bien.
    Te felicito.

    Besos.

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  3. Si tuviese que votar, la verdad, no sé a que microcuento le daría más puntos, o votaría según la temperatura del cuerpo y de los sentidos.
    Feliz fin de semana.
    Un abrazo.

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  4. Olé, olé, Isa. No te conocía en esta faceta y vaya qué bien lo haces. Me has dejado sin palabras.
    Besos

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  5. Tus cuentos me han embravecido el crótalo, Isa. Que bien cocinados en los hervores de lo erótico. UN bravo¡ Carlos

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